¿Te acuerdas de la película Limitless de Bradley Cooper? 

Si la has visto probablemente recuerdes la sustancia que se convierte, junto al personaje, en protagonista absoluta.

Un viejo conocido le ofrece NZT-48, una pastilla en pruebas que asegura una mejora en el funcionamiento cerebral.

Lo que sucede inmediatamente después de tomársela es impresionante. Con una sola dosis de la píldora, el escritor fracasado no sólo fue capaz de terminar su libro, sino que además mejoró todas sus habilidades tanto físicas como mentales.

No quiero desilusionar a nadie pero el NZT-48 no existe. Pero se conoce una sustancia parecida, el modafinil o modafinilo.

Se trata de un neutroestimulante indicado para el tratamiento de problemas de sueño y que a menudo se prescribía para el TDAH. (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad).

Este potenciador cognitivo fué desarrollado en los setenta por el químico francés Michel Jouvet con el propósito de tratar la privación crónica del sueño. Pero con el paso del tiempo el uso de esta droga ha pasado a tener otros beneficios.

Algunas personas que la consumieron aseguraron haber conseguido niveles de concentración y energía física que nunca antes habían experimentado y sostenían no haber sufrido ni el más mínimo efecto secundario.

Con este tipo de drogas conocidas como drogas inteligentes o estimulantes de la memoria, no se tiene certeza de cómo actúan en nuestro cerebro y en algunos testeos se encontraron efectos adversos como ansiedad, fuertes dolores de cabeza, nerviosismo, diarrea y dolores musculares.

En países como Estados Unidos y Reino Unido estos potenciadores están en auge. Expertos advierten que la única justificación es la presión a la que se someten los estudiantes universitarios y jóvenes trabajadores. Como ya aseguraba el filósofo Byung-Chul Han,  esta sociedad del cansancio es responsable de que cada uno de nosotros se comporte consigo mismo como un “capataz esclavizan” y del hecho de que la vida laboral y personal estén cada día más cerca. Algo que a mí me preocupa especialmente.

Sin embargo, muchos expertos aseguran que frente a la presión de la vida actual, el modafinilo es una mejor opción frente a otras sustancias ilegales y adictivas.

Cabe decir que el uso de esta droga no es algo nuevo. La revista Nature, en 2008, hizo una encuesta entre sus lectores en la que se demostró que casi la mitad de ellos utilizaban este medicamento o derivados como un potenciador cognitivo de manera regular.

Como cualquier químico, existe algún efecto secundario. Aunque frecuentemente se trata de náuseas y dolores de cabeza que tienden a disminuir con el paso del tiempo, también se han asociado otros más graves. Esta droga ha sido relacionada con enfermedades de la piel potencialmente mortales como el síndrome de Stevens-Johnson y la necrosis epidérmica tóxica.

Después de saber que esta droga es real y existe, ¿la tomarías?